domingo, 8 de marzo de 2020

Mujeres en el deporte

Pocos son los nombres de referentes en el deporte femenino que cualquier adolescente puede decirle; pregúntele en cambio por masculinos, la lista puede ser interminable. De ahí este artículo. Queríamos rescatar del olvido a algunos de esos referentes y conocer que a lo largo de la historia ,no sólo en la actualidad ,muchos nombres de mujeres deberían estar en las listas de referentes de cualquier amante del deporte. Advertimos de que no están todas las que deberían pero hemos escogido algunas de las más relevantes en diferentes épocas y en diferentes disciplinas para demostrar mujeres deportistas que han sido relegadas a un segundo plano o al olvido más absoluto.


 




Nettie Honeyball (1894)

Nettie Honeyball fue una activista de los derechos de la mujer, quiso demostrar que “las mujeres no son esas criaturas ornamentales e inútiles que los hombre pintan” y que, al contrario, podían lograr emanciparse y tener un lugar importante en la sociedad. Para ello, en 1894, Nettie Honeyball fundó el primer club deportivo femenino, el British Ladies Football Club. Publicando un anuncio en la prensa para buscar a compañeras que le ayudaran en esa aventura, y gracias a buenas relaciones públicas y su gran empeño, consiguió que el primer encuentro tuviera una asistencia multitudinaria.

Charlotte Cooper (1900)

Charlotte Cooper, tenista profesional, fue la primera mujer en ganar un título olímpico y lo hizo en los Juegos Olímpicos de París 1900. No recibió medalla porque estas no comenzaron a otorgarse hasta la siguiente edición de los Juegos. Fue cinco veces campeona del torneo de Wimbledon, la última de ellas en 1908, con 37 años de edad (un récord hoy imbatido) y ostentó el título de subcampeona en seis ocasiones más.

Lilí Álvarez (1924)

Lilí Álvarez fue una polideportista, escritora y periodista española. Disputó tres finales de Wimbledon y tres semifinales del Open Francés. Fue la primera española que participó en los Juegos Olímpico, en París en 1924. En 1931 conmocionó al mundo al ser la primera mujer en vestir una falda dividida.

Gertrude Ederle (1926)

En los Juegos Olímpicos de 1924 logró su primera medalla de oro y ha establecido más de veintinueve récords mundiales. Esta campeona olímpica de natación fue la primera mujer en cruzar a nado el Canal de La Mancha, que separa Gran Bretaña de Francia. Lo hizo en 1926, después de un primer intento fallido en 1925, y tardó 14 horas y 34 minutos en llegar a la orilla francesa, batiendo el mejor tiempo que ostentaba un caballero. Su récord de tiempo solo pudo ser batido mucho tiempo después, en 1950.

Alice Milliat (1928)

Alice Milliat fue miembro de Femina Sport y ayudó a formar la “Federación Francaise Sportive Feminine” en 1917. En 1921 organizó el primer evento deportivo femenino internacional en Montecarlo y en agosto de 1922 se llevaron a cabo las primeras Olimpiadas Femeninas en París donde compitieron mujeres de Estados Unidos, Gran Bretaña, Suiza, Checoslovaquia y Francia.

El COI convenció a Milliat y al FSFI de cambiar el nombre de su evento para que no incluyera la denominación de “Olimpiadas”, a cambio de añadir varios eventos femeninos a los Juegos Olímpicos de 1928. Los Juegos Olímpicos de Coubertin, debido a la presión de Milliat, finalmente integraron cinco eventos femeninos de atletismo frente a los 22 masculinos en los Juegos Olímpicos en 1928. Jutta Kleinschmidt (1962)

Empezó su carrera deportiva en 1987 participando en rallys como piloto de motocicletas hasta 1992, cuando decidió participar en carreras de resistencia de automóviles. En 1998 hizo parte del debut del primer equipo femenino en competencia profesional de automóviles en el UAE Desert Challenge.

Se impuso como ganadora en el 2001 en la competencia máxima del Rally el Paris-Dakar venciendo a competidores de todos los géneros, fungiéndose como la única primera y única mujer en haber logrado este título hasta la fecha.

Kathrine Switzer (1967)

Katherine Switzer fue la primera mujer en correr un maratón, en 1967 y más tarde, en 1974, ganó la Maratón de Nueva York. Por aquel entonces, Switzer tenía 19 años, estudiaba periodismo deportivo en Nueva York y, como allí no había disciplinas deportivas para mujeres, ella practicaba con el equipo masculino de atletismo. Briggs, su entrenador, solía contarle historias de las 15 maratones de Boston en las que él había participado. Cansada de todas esas historias, le propuso correr la maratón, pero él no creía que una mujer fuera capaz de correrla, porque consideraba que las mujeres eran “físicamente inferiores”. Ante la furia de Switzer, su entrenador le propuso un trato: si ella le demostraba que podía completar ese recorrido, él mismo la llevaría a Boston. Un día, en un entrenamiento, corrieron no 42 sino 50 kilómetros y, cuando terminaron, él se desmayó. Al día siguiente, le dijo: “Tienes que inscribirte”.

Nadia Comăneci (1976)

Esta ex-gimnasta proveniente de Rumanía fue la primera atleta en la historia en conseguir una calificación de diez puntos (calificación perfecta) en una competición olímpica de gimnasia artística, y fue gracias a su ejercicio en barras asimétricas en los Juegos Olímpicos de Montreal 1976, cuando ella solo contaba con 14 años. Nadie hasta entonces había obtenido esta nota en un ejercicio de gimnasia artística de unos Juegos Olímpicos. En el año 2000, la Laureus World Sports Academy la nombró como una de las atletas del siglo.

Edurne Pasabán (2001)

Una de las grandes hazañas del deporte español la ostenta Edurne Pasabán, que fue la primera mujer en el mundo en coronar los 14 ochomiles (14 montañas de más de ocho mil metros de altura), y la vigésimo primera persona del mundo en hacerlo. Su primer ochomil fue el monte Everest, en 2001, y el Shisha Pangma, en el Tíbet, fue su último ochomil coronado, en 2010.