domingo, 7 de marzo de 2021

GLOSARIO FEMINISTA

Lista de términos y sus definiciones para adentrarse en la lucha feminista

 Androcentrismo: hace referencia a la visión del mundo que sitúa al hombre como el centro de todas las cosas. Esta idea se basa en la afirmación de que la concepción masculina es la única y universal para toda la humanidad.

Brecha de género: la brecha laboral o de género es la diferencia que existe entre los ingresos de una mujer y un hombre que realizan un mismo trabajo.

Ciberfeminismo: Defiende que las mujeres deben hacer uso de las nuevas tecnologías. Se ocupa del vínculo entre mujeres y tecnologías de la información. Se parte de la invisibilidad de las mujeres en el mundo tecnológico y científico. Las feministas presentes en el ciberespacio han creado redes orientadas a resolver los problemas de las mujeres. Esta rama surgió en los años noventa.

Corresponsabilidad: es el reparto equitativo de las tareas y responsabilidades familiares y domésticas entre hombres y mujeres, con el fin de distribuir de manera justa los tiempos que se deben llevar a cabo en estas ocupaciones.

Cosificación: acción de cosificar, es decir, reducir a la condición de “cosa” a una persona. La más extendida es la cosificación sexual, aquella que ocurre cuando una persona es reducida a sus atributos físicos y es vista como un objeto sexual.

Deconstrucción: en relación al feminismo, se trata de la descomposición y análisis de realidades y categorías con el fin de cuestionar los valores tradicionales e impuestos. Esta definición es defendida por Judith Butler, que alega que deconstruir no es solo derribar, sino también construir desplazando los conceptos universales y conservadores.

Ecofeminismo. Cuestiona el papel que tiene el sistema en el que vivimos y su forma que afecta al medioambiente y a las mujeres. Esta corriente surgió a mediados de los años sesenta cuando la segunda ola feminista comenzó a tener un papel activo en la sociedad y en la defensa del medio ambiente. Esta rama tiene como objetivo salvar al planeta, valorar la naturaleza, a la mujer y generar acciones en su beneficio.

Empoderamiento: en el Feminismo, adquisición de poder e independencia de las mujeres respecto a los hombres, con el fin de mejorar su situación de desigualdad.

Estereotipo: los estereotipos de género definen el rol de una persona en función de su género y, con ello, están estableciendo las metas y expectativas sociales tanto del hombre como de la mujer.

Feminicidio: este término hace referencia al asesinato que produce la muerte de una mujer por el simple hecho de ser mujer. En el año 2020 en España se registraron 83 feminicidios, y en lo que llevamos de 2021 ya ha habido 11 únicamente en España. Estos datos se pueden consultar en la web www.feminicidio.net.

Feminismo: según la RAE, el Feminismo es definido como “el principio de igualdad de derechos de la mujer y el hombre así como el movimiento que lucha por la realización efectiva en todos los órdenes del feminismo”. Este concepto nació en Francia en el siglo XIX y hay diferentes ramas que se han desarrollado dentro del Feminismo.

Feminismo radical: Es el movimiento que goza de mayor popularidad, y está relacionado directamente con una serie de valores, como se puede inferir del manifiesto de la huelga feminista convocada con motivo del Día Internacional de la Mujer (8M): anticapitalismo, marxismo, ecologismo, animilitarismo, pacifismo, antirracismo y antiliberalismo. Este movimiento sería partidario de destruir el sistema social actual, que sería desigual, basado en el concepto de ‘patriarcado’. Además, asume que dicha estructura social desigual se cimenta en el género. Para el feminismo radical, el género es una asunción totalmente cultural, y es el fruto de la desigualdad entre ambos sexos. No obstante, este tipo de feminismo conlleva algunos problemas teóricos difícilmente solventables cuando se revisa la literatura científica al respecto, o la propia antropología-

Feminismo socialista: Podría considerarse una parte del feminismo radical, en el sentido en que sostiene que la mujer sufre una opresión, no solo por parte del denominado ‘patriarcado’, sino por parte del capitalismo; y que, además, ambos están íntimamente relacionados. Pero esta hipótesis tiene serios problemas teóricos: asociar términos como 'patriarcado' y 'capitalismo' no tiene sentido a nivel histórico, dado que desde el momento en que la mujer comienza a relacionarse con los medios de producción del mercado, se produce precisamente la rotura del patriarcado. Otra de las ideas que sostiene este tipo de feminismo es que la mujer es un colectivo como tal, una clase social; una teoría muy influenciada por la lucha de clases de Karl Marx.

Feminismo liberal: Comienza con el movimiento sufragista a finales del siglo XIX. El principal objetivo del movimiento era que las mujeres pudieran ejercer su derecho al voto, acceder a educación, incluir a la mujer en la esfera pública y tomar los mismos cargos de poder que los del hombre. Defiende que la situación de las mujeres no es como opresión ni explotación sino como desigualdad y postularon reformas para lograr igualdad de entre los sexos.

Feminismo afrodescendiente. Busca reivindicar la posición de las mujeres afrodescendientes, promueve un mundo más plural y diverso donde la sociedad occidental y blanca no sea indiferente antes estos problemas, donde el racismo ha establecido que los privilegios de las mujeres blancas son mayores a los de las otras etnias

Feminismo de la diferencia. Es contrario al feminismo de la igualdad, surge en los años sesenta, su lema es “ser mujer es hermoso”, expresa que hay una dualidad entre un género y otro, por lo que las mujeres son diferentes a los hombres. Se considera una variante del feminismo radical.

Género: Hace referencia a las características que cada grupo social asigna a lo masculino y lo femenino. El género se aprende, puede ser educado, cambiado y manipulado. Se entiende por género la construcción social y cultural que define las diferentes características emocionales, afectivas, intelectuales, así como los comportamientos que cada sociedad asigna como propios y naturales de hombres o de mujeres. Ejemplos de esta adscripción de características en nuestra sociedad es pensar que las mujeres son habladoras, cariñosas y organizadas y los hombres son activos, fuertes y emprendedores. Podemos decir, usando las palabras de Victoria Sau, que el género es la construcción psicosocial del sexo. Una primera función implícita en el género es la de hacer patente que hombres y mujeres son más diferentes que similares, y éste es el motivo de que la sociedad humana haya establecido la existencia de estos dos géneros, fenómeno que tiene una dimensión universal.

Interseccionalidad: sugiere que los clásicos modelos de opresión dentro de la sociedad, tales como los basados en el racismo/etnicidad, género, religión, nacionalidad, orientación sexual, clase, discapacidad, discriminación a las personas trans, entre muchas otras; no actúan de forma independiente entre sí, sino que se interrelacionan creando un sistema de opresión que refleja la “intersección” de múltiples formas de discriminación. Por ejemplo, ¿Vivían igual una mujer blanca y una mujer negra en EEUU en la década de los 50? Las mujeres blancas disfrutaban de mejor calidad de vida por su privilegio de raza, aunque ambas recibían discriminación de género.

Invisibilización: La invisibilización de las mujeres significa el no reconocimiento social de la mujer en los distintos espacios en los que se desenvuelve. La invisibilización es una forma de exclusión, un proceso que lleva a omitir la presencia de un grupo social.

Machismo: hace referencia a la actitud o manera de pensar de quien sostiene que el hombre es por naturaleza superior a la mujer.

Mansplaining: derivado de las palabras “man” (hombre) y “explaining” (explicar), ocurre cuando un hombre interrumpe a una mujer para explicarle algo de manera condescendiente, por el simple hecho de asumir que él tiene un mejor manejo del tema que se esté tratando sin ningún tipo de prueba, desacreditando a su interlocutora por su género.

Micromachismo: son pequeños gestos sexistas o machistas, algunos de ellos muy sutiles, que ayudan a perpetuar roles de género, machismo, violencia suavizada contra las mujeres, hipersexualización… Por ejemplo, la frase “tu marido te ayuda en casa”; cuando realmente no debería ser una “ayuda” sino una tarea realizada por ambos en igual magnitud.

Misoginia: misoginia está formado por la raíz griega "miseo", (odiar), y "gyne" (mujer), y se refiere al odio, rechazo, aversión y desprecio de los hombres hacia las mujeres y, en general, hacia todo lo relacionado con lo femenino.

Patriarcado: Se denomina como patriarcado al predominio de la autoridad que ejerce un varón sobre un grupo de personas o sociedad, especialmente sobre las mujeres y los niños. Esta organización social desemboca en la opresión hacia las mujeres de forma tanto individual como colectiva.

Perspectiva de género: La perspectiva de género es un método para analizar de una forma más equitativa y no androcéntrica la sociedad en la que vivimos y asegurar que mujeres y hombres influyan, participen y se beneficien de igual manera en todos los ámbitos de la política, la sociedad y la cultura. También se denomina enfoque o dimensión de género, así como 'mainstreaming' o transversalidad de género.

Rol de género: Los roles de género son el conjunto de papeles y expectativas diferentes para mujeres y hombres que marcan la diferencia respecto a cómo ser, cómo sentir y cómo actuar. Tanto hombres como mujeres se ven oprimidos por estos roles.

Sexismo: Serían aquellas actitudes que favorecen y perpetúan la desigualdad y la jerarquización en el trato que reciben las personas y que se hace sobre la base de la diferenciación sexual. El sexismo no es tan evidente como el machismo (actitud de prepotencia con respecto a las mujeres). Es un comportamiento individual o colectivo que desprecia un sexo en virtud de su biología, perpetua la dominación de los varones y la subordinación de las mujeres.

Sexo: En oposición al término género, hace referencia a los aspectos exclusivamente biológicos, a las diferencias entre mujeres y hombres con relación a sus órganos genitales y a su función en la reproducción. Se nace con unas características sexuales.

Sororidad: se denomina sororidad al afecto y la solidaridad entre mujeres, especialmente en la lucha por su empoderamiento.

Techo de cristal: se refiere al conjunto de normas no escritas al interior de las organizaciones que dificulta a las mujeres tener acceso a los puestos de alta dirección. Es la razón por la que tan solo en 9 países el 30% de los altos cargos están ocupados por mujeres, en 10 países consta entre el 20% y 30%, y en el resto se mueven entre el 3% y el 18%. Son datos de un informe del CRSI en 56 países distintos.

Transfeminismo. Se desarrolla durante la tercera ola del feminismo criticando el binarismo (el género se divide en mujeres y hombres) tradicional, sino que existen múltiples tipos de identidades sexuales diferentes, como transgénero, pangénero, bigénero. Reivindican la multitud de minorías sexuales.

Violencia de género: La violencia es toda conducta o amenaza que se realiza de manera consiente y que causa daño físico, psicológico, sexual o económico. Se conoce como violencia de género al maltrato que ejerce un género hacia otro, que puede ser del hombre hacia la mujer o viceversa.

María Alexandra Goidan Vasilica y Nuria Villar Marzal  4º ESO B